Protecciones específicas
por la edad
Planificar, prevenir y responder ante emergencias pensando en todas las edades.
¿Qué vas a ver?
Origen y definición
Los planes de protección civil son instrumentos de previsión para la correcta movilización de recursos y materiales en caso de emergencia, con el principal objetivo de proteger la vida de las personas y los bienes ante incendios forestales, terremoto, inundación, riesgos volcánicos, accidentes con sustancias químicas, etc.
Seguir leyendo +
Tienes derecho a la protección, a recibir toda la información pertinente, y a ser atendido por las administraciones públicas en la fase de preparación, durante y después de la catástrofe. La información pertinente supone el aviso, con la máxima antelación posible, de riesgos colectivos importantes que puedan afectar a la población, así como de las medidas previstas para disminuir su impacto y la posterior recuperación.
Son necesarias, además, medidas específicas para ‘grupos críticos’ como la niñez, las personas mayores, o aquellos con enfermedades o una discapacidad.
Ocultar texto
¿Qué significa esto para ti?
Como hemos visto estos últimos años a la luz de la pandemia de COVID-19 o la tormenta Dana en Valencia, en las situaciones de emergencia no todos corremos el mismo riesgo: existen grupos de población más vulnerables, entre ellos las personas mayores y aquellas en situación de discapacidad y/o dependencia .
Seguir leyendo +
Planificar, prevenir y responder pensando en todas las edades
Las emergencias no afectan por igual: es necesario identificar y abordar las vulnerabilidades que ponen en riesgo a las personas mayores y a aquellas en situación de dependencia.
- ✔
Cerca de la mitad de las víctimas de la reciente tormenta fueron personas mayores, a raíz de la soledad no deseada (aislamiento de redes familiares y vecinales), dificultades motrices y sensoriales o por la necesidad de cuidados específicos.
- ⚠
El 70% de la mortalidad asociada al COVID tuvo lugar entre personas de más de 65 años, no sólo por contagios, sino también por las secuelas sociales y sanitarias derivadas de la crisis.
- 🤝
Durante la cuarentena del COVID se denunciaron casos en los que ciudadanos acudían a ayudar a personas mayores o con discapacidad porque no recibían asistencia por otras vías.
Las personas mayores constituyen un grupo heterogéneo y con diversas fortalezas, pero a la hora de trazar planes de prevención es necesario identificar qué vulnerabilidades ponen en peligro a una persona y en qué sectores de la población son más frecuentes.
El envejecimiento conlleva más vulnerabilidades porque se han acumulado a lo largo de la vida, no porque el propio proceso de envejecer sea el causante. Las dificultades asociadas a la vejez, aunque normalmente no disminuyen la calidad de vida, pueden ser un obstáculo si se produce una emergencia:
- Perder unas gafas o el bastón puede disminuir drásticamente la movilidad y capacidad de adaptación ante una emergencia.
- Las enfermedades crónicas pueden agravarse por la interrupción del tratamiento habitual.
- La ausencia de redes de apoyo, la menor conexión digital y las deficiencias sensoriales pueden dificultar la comprensión de avisos e instrucciones necesarios para reaccionar a tiempo.
Ocultar texto
- Sistemas eficaces de comunicación.
- Preparación previa a los desastres.
- Planes de protección adecuados a las personas mayores.
- Proceso de recuperación inclusivo.
- Elaboración de un nuevo plan de Protección Civil que incluya a las personas mayores.
¿Sabías qué?
Proceso de evaluación
Lo primero y más importante ante cualquier emergencia es avisar a la población mediante sistemas eficaces de comunicación de la información.
Las poblaciones en mayor situación de riesgo ante cualquier emergencia nacional son las más empobrecidas económicamente, ya que tienen a vivir en zonas aisladas o rurales, sin dispositivos electrónicos… El no advertir a ciertos grupos aumenta tanto su riesgo de muerte como el de sufrir enfermedades y lesiones. En una emergencia, el tiempo es oro y cuanto antes alcancen las noticias a la población, dispondrán de más tiempo para prepararse adecuadamente o evacuar a una zona segura.
Seguir leyendo +
Comunicación inclusiva y preparación ante emergencias
Los avisos deben ser culturalmente apropiados – comprensibles según el nivel de alfabetismo, incluyendo lenguas minoritarias – e inclusivos de toda tecnología – empleando la radio y sistemas de megafonía además de móviles, y combinando tanto medios escritos como auditivos.
Un sistema eficaz de comunicación no dejará a nadie sin la posibilidad de protegerse, pero, allá donde no llegan las instituciones oficiales, podemos cuidarnos los unos a los otros:
- Las organizaciones vecinales pueden elegir ‘capitanes de manzana’ o barrios que avisen casa por casa y localicen a las personas de mayor riesgo.
- Existen sistemas de voluntarios que emparejan vecinos con personas vulnerables para que nadie se quede solo.
Es igualmente necesaria una correcta preparación previa a los desastres; una respuesta rápida e integral puede salvar muchas vidas.
Los Estados a menudo dan prioridad a las personas con movilidad nula – una acción, por supuesto, vital y necesaria – pero no siempre plantean ayudas para quienes tienen movilidad limitada, que terminan dependiendo en gran medida de la bondad de su entorno.
Abandonar un edificio rápidamente, utilizando las escaleras de emergencia, saliendo por una ventana o teniendo que sortear una valla… son actividades que las personas con cualquier dificultad motora o movilidad reducida no serán capaces de llevar a cabo. Por ejemplo:
- Un centro residencial con un plan de evacuación adecuado estará preparado para evacuar en primer lugar a personas con diálisis o respiradores, y sabrá igualmente a dónde realizar el traslado.
- Informar a la población de un desastre y la necesidad de evacuar puede no ser suficiente en áreas donde no existan medios físicos para marcharse – ya sea por pobreza, por ser un emplazamiento rural con menor presencia de voluntarios o peor transporte público, o por la interrupción de los servicios de atención y apoyo.
Ocultar texto
¿Sabías qué?
Algunos países utilizan un sistema de banderas —como las que indican mareas en la playa— para avisar de peligros inminentes. En Bangladés, cuando se ondean dos banderas en un mismo poste, es una advertencia de una futura tormenta. También Japón tiene implementada una bandera roja y blanca que avisa de posibles tsunamis.
Memoria Anual del Centro Nacional de Emergencias (2021) | Dirección General de Protección Civil y Emergencias. (tormenta Filomena, erupción volcánica Canarias)
Planes Territoriales de Emergencias – Instituto Español para la Reducción de los Desastres; para consultar el plan específico a tu Comunidad Autónoma.
Protocolo de actuación en caso de desastres naturales, de la Escuela Nacional de Protección Civil.
Durante la emergencia
Los Derechos Humanos han de respetarse siempre – incluso en situaciones de emergencia – y para limitarlos debe existir una justificación. Las restricciones al movimiento durante el COVID tenían sentido como medida de protección de la comunidad, pero las restricciones en centros residenciales fueron casi absolutas, incluso después de iniciar la vacunación, según el Defensor del Pueblo y la Sociedad Española de Geriatría:
Vulnerabilidad: la característica de un colectivo que, en determinadas situaciones, pueden ser afectados en mayor medida que el resto de la población.
Amenaza de peligro inminente: se conoce un evento que pone en riesgo inmediato o latente a las personas y bienes.
Planes de prevención: no se puede prevenir el desastre natural, pero sí reducir sus consecuencias, mitigando los daños para que no se convierta en una catástrofe.
Restricciones al contacto social
Pudieron causar o agravar la ansiedad o depresión.
Limitaciones a la movilidad
Suponen pérdida de peso y músculo, haciendo a la persona más frágil y menos propensa a superar una enfermedad.
Deterioro cognitivo
La ruptura de las relaciones y rutinas habituales, supone un grave riesgo de empeorar.
Para que todo ello no se vuelva a repetir, es necesario contar con planes de protección adecuados a las personas mayores. La discriminación por edad en emergencias es una consecuencia directa de políticas y planes mal diseñados: al no plantearse sus necesidades específicas, estas no se cumplen durante la emergencia.
Seguir leyendo +
Los medios de transporte han de llegar a aquellas zonas en que las personas no puedan conducir o vivan aisladas, la distribución de alimentos y objetos de necesidad inmediata han de llegar a todos los lugares afectados, aquellas personas que no puedan aguantar una cola de muchas horas o que no puedan siquiera desplazarse al centro de distribución, deben ser atendidas a domicilio. La ayuda no puede ser de ‘talla única’, debiendo ofrecer siempre diversas opciones.
Ocultar texto
¿Sabías qué?
En Florida, se utilizan los datos del censo para establecer los puntos de distribución de alimentos y agua en las zonas en que viven las personas de edad. Así, se reducen los tiempos necesarios para la distribución, pudiendo contactar a las personas mayores del área e identificando sus necesidades de manera inmediata. Esta medida beneficia a toda la población, ya que se reducen los tiempos de espera para todos.
NACIONAL
Derecho a la protección en caso de catástrofe (art. 4), y otros artículos (5-6) de la Ley 17/2015.
INTERNACIONAL
“Cuestión 8: situaciones de emergencia”, del MIIPA.
Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (art. 11)
Art. 29 de la CIDHPM, sobre situaciones de riesgo y emergencias humanitarias.
Res. 48/14 del Consejo de Derechos Humanos. (Relator Especial sobre cambio climático)
Res. 46/7 del Consejo de Derechos Humanos. (Relator Especial sobre Derechos Humanos y medio ambiente)
Proceso de recuperación
Durante el proceso de recuperación, no todos tenemos la misma capacidad física o económica para recuperarnos. La vulnerabilidad de las personas mayores en el proceso de recuperación se da al no ser tenidos en cuenta, no por una incapacidad propia:
Personas con movilidad reducida
Aunque no sea incapacitante ni total – enfrentan mayores dificultades para hacer frente a la limpieza o reformas del hogar.
Personas
mayores
Son dejadas de lado en los nuevos programas de empleo pensados para paliar dificultades económicas.
Posibilidades de las personas
No todos tenemos las mismas capacidades o posibilidades de acercarnos hasta los puntos de suministro de alimentación o agua.
Es necesaria la igualdad también en el restablecimiento y reconstrucción de las comunidades después de las emergencias. Las prestaciones económicas y programas de rehabilitación deben incluir a las personas mayores y adaptarse a sus necesidades específicas, siendo incluidos, por tanto, en todo programa de generación de ingresos, continuación de la educación y/o programas de préstamos para nuevas viviendas. Sobre todo, se deben tener en cuenta las capacidades específicas de las personas mayores, reconociendo su potencial como líderes familiares y comunitarios.
Seguir leyendo +
Ignorar sus necesidades puede incluso dificultar la recuperación de las comunidades afectadas, ya que no debemos olvidar nunca el rol fundamental que pueden tener las personas mayores en la recuperación tras una catástrofe, al haber vivido previamente catástrofes naturales, conocer las características naturales del área antes de la urbanización, o apoyar a familias en las tareas de cuidado mientras se recuperan económicamente.
Ocultar texto
¿Qué hace falta?
Aunque sí tienen en cuenta las situaciones de discapacidad y dependencia, los planes de protección civil ignoran las especificidades sobre personas mayores.
Desde la instalación de refugios y letrinas tras un desastre natural, hasta la oficina a la que acudir a solicitar compensaciones económicas, han de ser accesibles para personas con movilidad reducida en distinta medida o deficiencias sensoriales de cualquier tipo.
Seguir leyendo +
De igual manera, no es suficiente la atención médica que atiende a las necesidades inmediatas de la emergencia, sino que se deben restablecer los tratamientos de enfermedades crónicas que hayan sido interrumpidos.
Es por todo ello que se requiere de protocolos y medidas de atención definidas para las personas mayores. Es necesario crear conciencia entre los organismos de socorro sobre el estado físico y de salud de las personas de edad y cómo adecuar la prestación de sus servicios a ello…
Ocultar texto
¿Sabías qué?
El proyecto SENES, de la Asociación Bienestar y Desarrollo, ofrece formación a las fuerzas de seguridad para reaccionar e identificar de manera temprana situaciones de vulnerabilidad. Además, busca alianzas en el propio barrio para reducir el aislamiento social.
¿Cómo aseguramos las protecciones específicas por edad?
Accede a toda la información sobre cómo ejercer las protecciones específicas por edad haciendo clic en el siguiente botón.
Derechos y deberes
Seguir leyendo +
- Todos tenemos el deber de auxilio y socorro cuando presenciamos una situación de peligro grave y manifiesto. Esto no significa tener que atender directamente a la persona en peligro —quizás no sabemos cómo hacerlo—, pero siempre debemos avisar a los servicios de socorro y no abandonarla hasta que lleguen.
- Cuidar a nuestros vecinos como queremos ser cuidados nosotros. Puede ser buena idea unirnos a las redes vecinales y grupos de voluntarios de nuestra área, para saber cómo actuar en caso de emergencia.
- Utilizar las prestaciones recibidas para aquello que fueron concedidas, sin abusos.
- Ser respetuoso en todas las fases de la emergencia: cuidar los espacios comunes como albergues y medios de transporte, no gritar ni realizar grandes ruidos en espacios compartidos (especialmente por la noche), no colarse en las filas de puntos de distribución…